jueves, 29 de octubre de 2009

HECHA LA LEY, HECHA LA REFORMA: A PROPÓSITO DE LA LEY N° 29402.

Por: Juan Ernesto Gutiérrez Otiniano
Abogado por la Universidad César Vallejo- Perú
Docente e Investigador Universitario.



En el Diario Oficial El Peruano, con fecha 08 de septiembre de 2009, se publicó la Ley nro. 29402 ( en vacatio legis), cuyo contenido reforma el artículo 90° del texto constitucional peruano de 1993, en el sentido que a partir del año 2011 el número legal de congresistas incrementará de 120 a 130, creándose asimismo el Distrito Electoral Lima- Provincias.

Es el caso que, luego de analizar el contenido del artículo 206° de nuestra lex legum, es posible advertir que el procedimiento seguido para la aprobación de la mencionada reforma se ha limitado sólo a la aprobación efectuada en dos legislaturas ordinarias consecutivas que los propios congresistas han llevado adelante y cuya propuesta ha surgido de su propio seno; dejando a salvo la siguiente interrogante, ¿por qué la propuesta de reforma no ha sido sometida a Referéndum? Y, ¿por qué será que a la población le sigue siendo indiferente que el número de congresistas sea mayor o menor?

Asumo que a estas alturas, hayan surgido posturas que invoquen el mecanismo tarifado por el propio texto constitucional peruano de 1993 (dos legislaturas ordinarias consecutivas, y aprobación mayoritaria a las dos tercios del número legal de congresistas); no obstante, debemos considerar que en el marco de una Democracia Representativa, constituye presupuesto básico para su vigencia el que la población (elemento gravitante de la estructura social) sea quien apruebe este tipo de reformas.

El incremento del número legal de congresistas, no ha constituido ni constituye un tema técnico, de modo tal que ha sido una categórica grosería omitir el filtro social, puesto que es la ciudadanía (el ambulante, el emolientero, la doñita del mercado, etc) quienes mediante el pago de sus impuestos hacen posible el pago de la planilla estatal.

Por eso y muchas cosas más, es posible colegir que la democracia ( con minúscula) no es más que un medio para llegar al ejercicio pleno del poder político ( sólo se respira a ello, durante las justas electorales), puesto que, para ser forma de gobierno, ésta deberá estar institucionalizada (formar parte del consciente colectivo); de allí que es posible efectuar un análisis científico de la misma, siempre y que superemos su concepción etimológica.

Entonces ¿cuándo será posible vivir una verdadera Democracia? ; considero que, cuando la población esté informada (o al menos cuando sienta necesidad de ello) y no se conforme con información basura (difundida agresivamente por medios de comunicación en la actualidad).

¿Por qué existen cadáveres políticos?; precisamente, porque aún la juventud peruana no asume su rol protagónico, pues en la medida que se siga pensando que la vida es como el Reggaetón, se mantendrá el statu quo. ¿Quiénes pierden con todo esto?; en definitiva todos, debido a que los jóvenes de hoy recibirán un país en muletas.

¿Qué vamos a heredar a las próximas generaciones? , ¿A caso más miseria humana? El desarrollo de los pueblos no se mide más por el hecho de tener extensas selvas de cemento, sino más bien por la calidad de su recurso humano. Por esa razón, es que sigue vigente la frase del vate González Prada: “donde pongo el dedo, brota la pus”, y vaya que la situación actual es análoga a la de un paciente que sufre las inclemencias de un cáncer terminal.

A veces me pregunto, ¿cuándo será posible leer o escribir un mensaje alentador?; pienso que será posible cuando los jóvenes se conviertan en verdaderos aburridos, por lo pronto seguiremos observando gente que se sustrae de la realidad.

¿Cuándo se jodió el Perú?, considero que desde el momento que no pudo cristalizarse el principio político propuesto por el dignísimo José Faustino Sánchez Carrión: “gobernar es educar”. En la actualidad, el mensaje oficialista se percibe como síntoma de totalitarismo: “léxico pobre, gramática básica”.

Finalmente, y antes que pueda producirme un mal hepático todo el análisis que vierto sobre estas líneas, puedo afirmar que, “en nada cambiará la situación legal y democrática del país incrementándose el número legal de congresistas o disminuyéndose éste: el problema es hombre, es cultural. ¡Por Dios!, vivimos el fenómeno de la castración cultural.

Debo retirarme a paso acelerado, luego de este asalto a mano armada a todas vuestras conciencias, precisando que, la verdadera democracia será la que tenga como fuente o punto de origen en nuestros hogares. En términos articulares: el día en que los padres concedan a sus hijos la oportunidad de expresar sus ideas en torno al manejo de los asuntos familiares y se traslade esta práctica hacia el ámbito social será posible consolidar el proceso democrático en el Perú; mientras tanto, el totalitarismo seguirá germinando al interior de los hogares peruanos, la clase gobernante se seguirá beneficiando con el desorden social y así participaremos activamente del baile de los que sobran.

No todo es producto de la casualidad, siempre tiene una razón de ser”.

El asalto ha terminado, pueden coger sus pertenencias y seguir su rumbo…